viernes, 1 de enero de 2021

La Cala del Ti Ximo en Benidorm y su mina de ocre.


Francisco Amillo Alegre



1 Situada en el Parc Natural de la Serra Gelada de Benidorm la cala del Ti Ximo permite disfrutar de una playa pequeña y tranquila, de aguas cristalinas, en el entorno natural de Serra Gelada.



La cala y el barranco del Ti Ximo.

2. La cala del Ti Ximo, enclavada en el Parc Natural de Serra Gelada, es un espacio accesible y que permite el disfrute de su playa, su mar y los paseos por un espacio con características muy especiales ya que este sector es el más seco de la Serra Gelada a causa del árido clima mediterráneo al que sin embargo se han adaptado algunas especies vegetales y animales.


Actualmente esta cala es conocida sobre todo por su pequeña playa de piedra y arena. Mide unos 30 metros, la mitad que su vecina cala Almadraba, con la que comparte el encanto de una playa casi virgen, tranquila, en medio de un espacio natural de gran belleza paisajística por sus acantilados, sus aguas cristalinas y su vegetación mediterránea. Estamos en un entorno privilegiado que completa la variedad de playas que tenemos en Benidorm. 

3 El barranco del Ti Ximo es el resultado de la acción erosiva del agua de lluvia que ha excavado un cauce profundo hasta llegar al mar. La fotografía está tomada desde la carretera que conduce a la torre de Les Caletes. Es una ruta muy adecuada para observar las características del barranco y las vistas del mar y Serra Gelada.


La cala del Ti Ximo es el final de un barranco de algo más de 700 metros de longitud en el extremo SO de la Serra Gelada, próximo al Racó de l'Oix. Hay en esa sierra muchos otros barrancos, abiertos durante milenios por la erosión de las aguas de lluvia que en otras épocas eran bastante más copiosas que en la actualidad. Los barrancos predominan en la vertiente terrestre de la sierra pero el del Ti Ximo es de los pocos que desembocan directamente a la mar y desde luego el más largo de ellos.  

Antaño los humanos lo aprovecharon cultivando la parte media y baja de sus laderas. Lo demuestran los bancales construidos con muros de piedra que aún podemos observar a pesar de estar abandonados desde hace tiempo. Roturar un terreno de fuerte pendiente mediante esa técnica era muy usual en la agricultura tradicional de la comarca; en la otra vertiente de la sierra tenemos muchos ejemplos. Los bancales permitían obtener superficies planas de tierra, aptas para cultivos de secano, predominando los algarrobos de los que aún sobreviven algunos ejemplares. Servían además para laminar la escorrentía del agua de lluvia disminuyendo su fuerza de arrastre y empapando mejor la tierra al mismo tiempo que se regaban los cultivos. También hay que destacar que el aire del mar, a menudo muy cargado de humedad, supone un aporte hídrico importante para cultivos y vegetación natural.


4 La gran pendiente del barranco y la escasez de precipitaciones no permitían una agricultura próspera, sólo una de secano de bajos rendimientos. Era preciso construir bancales para obtener pequeñas parcelas planas donde plantar algarrobos, una especie arbórea que soporta bien la pobreza de lluvias de esta zona.


La carretera que actualmente da acceso a la playa ha ocupado la parte final del lecho de ese barranco por lo que su aspecto es distinto al de antes de su adaptación al turismo. Lo mismo sucede en los otros tramos del barranco donde los antiguos cultivos han sido desplazados por la vegetación natural de pinos, matorrales y plantas aromáticas entre las que abunda el espígol o espliego, que no he visto en la vertiente terrestre de Serra Gelada. 

En siglos pasados era un lugar solitario por su lejanía a Benidorm y desde la Edad Media hasta el siglo XIX era también muy peligroso por la frecuencia de arribadas de naves corsarias norteafricanas. Hay muchos documentos en los que se indica que estas calas eran el escondite preferido de las naves norteafricanas que querían asaltar naves mercantes cristianas e incluso poblaciones costeras. Desde el punto de vista agrícola tampoco resultaba atractivo porque las cosechas eran de bajos rendimientos a costa de un trabajo intenso y duro. Aislamiento, peligro y pobreza: unas condiciones difíciles de imaginar para la mayoría de personas que hoy día acuden a disfrutar de su playa o a pasear atraídos por las magníficas vistas de esta parte del Parc Natural de Serra Gelada.

5 Algarrobos como este nos recuerdan que antiguamente el barranco del Ti Ximo era un espacio agrícola, sin los valores turísticos, paisajísticos y medioambientales que hoy día le caracterizan.


El topónimo “Ti Ximo” que reciben el barranco y su cala es la forma valenciana de “Tío Joaquín”, siendo "Ti" una forma respetuosa de referirse a las personas mayores de Benidorm. El topónimo se formó a partir del nombre de su propietario Joaquín Antonio Orquín Oriola nacido en 1853 [1]. Había construido los bancales en las laderas del barranco y los plantó de algarrobos, viñas y una higuera. 

Según se informa en varios artículos, a principios de la década de 1940 fue presionado y amenazado con la cárcel por no permitir la reapertura de la mina de ocre que había en su propiedad: 

[…] Joaquín Orquín, a quien todos conocían por El Ti Ximo, trataba de sacar algún provecho a una cala improductiva de su propiedad situada entre el Racó de l'Oix y la Punta El Cavall. Para ello se propuso construir unas tablas en las partes más propicias y plantar en ellas higueras y algarrobos. Levantó los cercos con piedras, buscó un lomo de tierra entre la roca y empezó a llenar capazos con la azada para rellenar las tablas. 

[…] unos ingenieros [...]  pasaron por la cala y comprobaron que la tierra que estaba esparciendo sobre los bancales era ocre […]. Inspeccionaron la cala y no tardaron en descubrir un apetitoso filón de ocre en uno de los rincones del barranco. Entonces, se pusieron en contacto con él y trataron de hacerle firmar […] para que ellos pudieran explotar la mina, lo que provocó la negativa de Joaquín Orquín […]

Los ingenieros aprovecharon su buena sintonía con el régimen y El Ti Ximo, que hacía las veces de alguacil, fue requerido en un despacho oficial de Alicante, donde fue coaccionado a firmar aquellos papeles bajo todo tipo de amenazas […]. Sin embargo, no cedió y se reafirmó en su propósito de utilizar esa tierra amarilla para cultivar higueras y algarrobos. Esa noche la pasó en la cárcel […]. Cuando comprobaron que la resistencia de Orquín no se resquebrajaba por más días que pasaran, urdieron otro plan: encerrar a sus hijos y soltarlo a él. Con sus hijos en la cárcel, El Ti Ximo puso la cruz sobre todos los documentos que le pusieron delante.”  [2] El autor del artículo da a entender que Joaquín Orquín fue obligado a vender sus tierras pero no es cierto ya que le pagaban una cantidad por explotarla según cuentan sus descendientes. También insinúa que era analfabeto, algo que no es cierto ya que hay al menos un escrito con su firma. 


Joaquín Orquín y su esposa Josefa Sanchís Such habían construido una casita de campo. Estaba muy bien situada, a suficiente altura del barranco para estar a salvo de sus avenidas y muy resguardada de los vientos. Su proximidad al mar, a unos 150 metros de la playa lo convertía en un lugar saludable por lo que, según se cuenta en Benidorm, la cedían a amigos y personas enfermas que se la pedían:

Compran un terreno, con una mina de ocre, en Sierra Helada y se le empieza a llamar la Cala del Tío Ximo. Construye una casita que es prácticamente de todo el pueblo. Según cuentan esta casita se presta y deja a los vecinos de Benidorm para celebraciones de cualquier índole, vacaciones e incluso para “sanatorio”. Me dicen que son muchos los recién casados que le piden al Tío Ximo la vivienda para pasar los primeros días de matrimonio. Otro servicio que hacía era de “sanatorio” para el que caiga enfermo y necesitaba aire puro a sus pulmones. Todos los vecinos de la villa disponían de esta casa como si fuera suya”  [3]. 

En la década de 1960, según se indica, la familia del Ti Ximo acabó vendiendo estos terrenos por unas 200.000 pesetas para poder pagar una deuda. En el Registro de la Propiedad nº 2 de Benidorm figura que era propiedad de la empresa "Asensi, Pérez y Lillo Sociedad Limitada" y que más tarde pasó a ser propiedad de Alfonso Puchades Jou.  


6 Antigua fotografía de la casa del Ti Ximo edificada sobre un bancal y con un corral adosado. Bajo una dependencia administrativa de la mina de ocre.


7 Estado actual de abandono de la casa del Ti Ximo con el tejado desaparecido. Los grafiti han deteriorado su estética exterior pero lo más grave es la pérdida del tejado y la caída  del enlucido de los muros que llevará, inexorablemente, a su desplome total. Seguirá el mismo camino que la dependencia de la mina de ocre que estaba debajo y de la que sólo quedan restos de muro


La casa del Ti Ximo no era su vivienda habitual. El barranco estaba entonces muy alejado del pueblo y “l’arreplegà de garrofes” o recogida de algarrobas, podía durar varios días. Tener un lugar donde pasar las noches mientras duraba la recolección era mejor que ir y venir cada día a Benidorm. En aquellos años estas casitas de campo eran frecuentes en muchos pueblos valencianos.

El carácter de hábitat temporal y la gran pendiente del terreno explican el pequeño tamaño de esta casa: su planta interior rectangular mide unos 15 metros cuadrados (3,20 x 4,90 metros), estando la única puerta en uno de los lados mayores. Los muros son de carga, de un grosor de 54 cm., construidos de piedra irregular cogida con mortero de cal y revocados exteriormente con mortero, lo que obligaba a encalar las paredes casi todos los años para evitar los daños de la erosión atmosférica.


8 Al estar construida la casa sobre un bancal la pared delantera se asentaba sobre el relleno pero la trasera se asentaba sobre la roca que llega a verse dentro de la casa y que se aprovechó para construir un aljibe revestido con mortero hidráulico.


La casa tenía dos plantas con una sola habitación por planta además de un corral adosado a la casa. No había comunicación directa entre casa y corral y era preciso salir de la casa para acceder a él. Era de planta casi cuadrada, 3,20 x 3,10 metros. Queda muy poco de él porque sus paredes, de unos 42 cm. de grosor, se han derrumbado.

La cubierta de la casa era de una sola vertiente que se inclinaba hacia el barranco. Por esta causa la habitación superior era más alta por la parte de detrás que por la de delante. Actualmente esa cubierta ha desaparecido y sólo quedan restos de sus tejas curvas de barro cocido. También ha desaparecido el techo de la planta inferior que era el suelo de la superior. Se construyó con ocho vigas de madera de las que sólo quedan dos; en ellas se apoyaba un cañizo y sobre él mortero de cal; no quedan vestigios que permitan deducir si el suelo de la habitación superior estuvo recubierto con losetas cerámicas como el inferior. Esta habitación, que supongo sería el dormitorio, tenía tres ventanas, una en cada pared exceptuando la del muro trasero, y era por tanto muy soleada y aireada.

9 La puerta de acceso a la casa, las dos únicas vigas que quedan del techo, la única ventana de esta planta desde la que se divisa la isla de Benidorm, la chimenea y restos de loseta cerámicas del pavimento.


10 A ambos lados de la ventana el aljibe y la chimenea y encima las dos únicas vigas del techo que quedan. 


La habitación inferior debía cumplir las funciones de cocina, comedor y sala de estar. Franqueada la puerta, observamos que el pavimento de losetas de barro cocido de 1 cm de grosor se asentaba directamente sobre la tierra, sin cámara que evitase humedades. A la derecha de la puerta una chimenea que se utilizaba sobre todo para cocinar. Estaba elevada del suelo, a unos 35 cm. y cubierta por una campana triangular a partir de los 80 cm. de altura. En su arranque tenía una repisa.  

11 Aljibe.

En la misma pared, al otro lado de la ventana, hay una estructura que parece un aljibe. Se aprovechó un saliente de  roca sobre la que se asentaba el muro y que no se recortó para poder construirlo. Estaba revestido de mortero hidráulico y presenta señales de haber contenido agua pero no quedan vestigios de cómo se conducía hasta allí. Por eso decir que aprovechaba el agua de lluvia es sólo una suposición.

12. El acceso a la segunda planta se conseguía mediante esta escalera en cuyo hueco estaba la alacena. 

Para finalizar la descripción de esta casita debo señalar que el acceso a la planta superior se hacía desde la baja mediante una escalera de obra. Debajo de ella se ven los restos de una alacena con al menos una estantería. Servía para guardar los escasos elementos de cocinar y comer que poseían en aquella época. No he visto ningún vestigio de electricidad y supongo que nunca la tuvo. Tampoco hay vestigios de cuarto de baño así que se supone que el corral cumpliría también con esa función.


13 La casa sin tejado y con la vegetación natural de pinos y matorral ocupando más espacio que antaño.


Tal vez he sido un tanto prolijo al describir esta casa pero estoy seguro que dentro de pocos años se derrumbarán los cuatro muros que aún se mantienen en pie y ya no será posible imaginar cómo vivían nuestros antepasados en sus hábitats temporales en pequeñas casas de campo como esta. He visto bastantes ejemplos de antiguas masías y casas de campo totalmente hundidas y de las que no queda ningún recuerdo. De la casa del Ti Ximo, que forma parte de nuestro patrimonio etnográfico, quedarán algunas fotografías y este escrito.


14 Casa del Ti Ximo. Desde la ventana de la planta baja los iconos de Benidorm: su mar, su isla, su sol, su playa.


Respecto al nombre de esta cala y barranco hay un hecho curioso. En su libro sobre los topónimos de Benidorm hasta el año 1955,  P. Almiñana suele dar muchas referencias de distintos años sobre cada topónimo. Pero en este no recoge ninguno y lo explica diciendo que se había transmitido de forma oral [4]. Yo he encontrado una referencia del año 1947: “el punto de costa denominado Cala del Barranco de Chimo, del término municipal de Benidorm (Alicante)” [5].




La mina de ocre del barranco del Ti Ximo.

Otro elemento de sumo interés en este barranco del Ti Ximo es una antigua mina de ocre amarillo que se exportaba a Alicante. El mineral abundaba en la parte baja de este barranco, en el que podemos observar varias entradas a galerías de extracción.


15 El ocre extraído en este barranco tenía un intenso color amarillo. La erosión del agua durante muchísimos milenios dejó al descubierto algunos afloramientos de ese mineral y en la carretera de acceso a la cala podemos observar algunos, por ejemplo el de esta fotografía.


Las aguas de lluvia al ir excavando su cauce durante milenios fueron dejando al descubierto pequeños afloramientos de ocre. Profundizando en ellos nuestros antepasados vieron que había gran cantidad de dicho mineral y que podían aprovecharlo.

Según los geólogos el ocre es una mezcla de óxidos y / o hidróxidos de hierro con arcillas. Por eso hay un ocre rojo, variedad terrosa de la hematites, del cual tenemos buenos ejemplos en las minas del Albir. También hay ocre amarillo, comúnmente denominado limonita, compuesta por hidróxidos de hierro (goetita y lepidocrocita) e impurezas y de este tipo era la mina de la cala del Ti Ximo. En ambos casos los minerales se encuentran rellenando fracturas de la roca y se formaron en el Triásico a partir del hierro y otras sustancias disueltas en el agua que circularon por dichas fracturas hasta precipitar en ellas.

En la parte de la Serra Gelada que corresponde al término municipal de Benidorm hubo varias minas en las que se extrajo ocre desde las últimas décadas del siglo XIX hasta la década de 1960. Una de ellas estaba junto a la Cova Gelada y en el siglo XIX se denominaba “San Pedro”. Según un diario alicantino de 1894 [6] su propietario Pedro Cortés Pérez había solicitado el registro en el Gobierno Civil “de la mina de ocre denominada «San Pedro», sita en el paraje que llaman Cueva Helada, término municipal de Benidorm”. Dicha mina figura sin nombre en el plano del término municipal de Benidorm elaborado por el Instituto Geográfico y Estadístico en 1897 y también en el del Instituto Geográfico y Catastral de 1952.


16 Detalle del plano del término municipal de Benidorm elaborado por el Instituto Geográfico y Estadístico en 1897. Localiza una mina de ocre en la Serra Gelada, muy próxima a la Cova Gelada.


Según indica en su blog Agatángelo Soler Llorca, el industrial alicantino Julio de España Ghiglione era propietario en la década de 1930 de una mina de hierro en Benidorm llamada “Los dos de siempre ya están aquí” [7] de la que no he encontrado ninguna referencia. Indica también que poseía otra mina de ocre llamada “San Rafael” y sobre ella he encontrado en el Archivo Municipal de Benidorm que estaba funcionando en febrero de 1936 y que en ella trabajaba el vecino de Benidorm Vicente Llorca. Desgraciadamente no indica su ubicación [8]; podría ser la mina San Pedro junto a Cova Gelada porque a lo largo del tiempo las minas pueden cambiar de nombre, pero es sólo una suposición.


Estas minas de ocre de Serra Gelada, como las del resto de la provincia, eran pequeñas y con escasa mano de obra. En todas ellas la extracción del mineral era manual y los operarios trabajaban por temporadas según la demanda. Esta demanda condicionaba también la cantidad extraída que podía oscilar entre 200 o 400 toneladas anuales. El mineral extraído se utilizaba exclusivamente para la fabricación de pinturas. En los últimos años se realizaba en Alicante y San Vicent del Raspeig pero en épocas anteriores la producción alicantina se exportaba a Barcelona, Gran Bretaña y Alemania [9].


La Mina San Francisco.


17 Detalle del plano del término municipal de Benidorm, año 1897. La torre de Les Caletes y el cuartel de Carabineros están marcados con precisión pero no pasa lo mismo con la mina. Sin embargo es muy probable que sea la mina de ocre del barranco del Ti Ximo. 


La presencia de una mina en el barranco del Ti Ximo aparece en el ya citado plano del término municipal de Benidorm del Instituto Geográfico y Estadístico del año 1897. Aunque no pone sus nombres se distinguen las calas Almadraba y del Ti Ximo y junto a ellas aparece un texto confuso: “Mina de Tohux”, que tal vez sea "Mina de Thous" con  el apellido mal escrito. Eso significaría que era propiedad de la familia Thous y curiosamente los padrinos del bautizo de Joaquín Orquín y una de sus hermanas fueron Alberto Thous y Vicenta Thous [1]. En el citado plano tampoco pone el signo convencional de mina que sí aparece en la mina San Pedro cerca de la Cova Gelada, lo cual nos permite pensar que tal vez no se explotaba en esos momentos. 

Sí está documentado que la mina se explotaba en el siglo XX y se llamaba “San Francisco”. En varios artículos y páginas de internet al hablar de la mina de ocre rojo del Albir se dice que se llamaba mina San Francisco. No se si se trata de un error o de una casualidad que ambas tengan el mismo nombre. Pero hay un hecho muy claro: en la documentación oficial de la primera mitad del siglo XX que he podido consultar la mina de Benidorm lleva el nombre de San Francisco y las minas del Albir tienen otros. Son más antiguas ya que en 1842 se constituyó una sociedad para explotar una “Mina de yerro titulada La Furia, en la sierra elada, término de Alfaz del Pino partida de Albir”. También en ese año se habla de otra “mina de yerro en la sierra elada, partida del Albir, término de Alfaz del Pino titulada El Desengaño”. 

En el “Boletín minero y comercial” del año 1900 se indica que en l’Alfàs del Pi estaban las minas de hierro “Concepción”, “Esperanza” y “Virgen del Carmen”.  En la década de 1930 se seguían llamando de idéntica manera: “En Alfaz del Pí se explotaron las minas de ocre de Francisco Raymundo y Aracil denominadas “La Esperanza” de doce pertenencias en el Barranco de Chirau; “La Inmaculada Concepción” en el Barranco de la Cueva del Bou de ocho pertenencias mineras; y “La Virgen del Carmen” de cuarentaycinco pertenencias situada en el Barranco del Arabí” [10]. Parece claro que hasta antes de la Guerra Civil no había en el Albir ninguna mina llamada “San Francisco”.


Volviendo a la mina de la cala del Ti Ximo no sabemos cuando se inició su explotación: “se sabe que ya, a finales del pasado siglo [XIX], se solicitó la concesión para una explotación minera […] pero lo cierto es que no se han encontrado vestigios de que se iniciara actividad alguna. Es a principios del siglo que finaliza [el XX] cuando se inicia la explotación de ocre" [11]. 

18 Estado actual de la entrada a una galería en el Barranc del Ti Ximo.


Sabemos que en 1936 se estaba explotando la mina San Francisco porque el 3 de febrero el gobernador civil de Alicante ordenó paralizar la extracción aunque no se indican los motivos. Consta en el Archivo Municipal de Benidorm que el 12-2-1936 la alcaldía remitía un oficio al gobernador civil "Manifestando que en contestación a su telegrama fecha 10 y oficio fecha 7 de los corrientes referente suspensión mina San Francisco de este término quedan cumplimentados y el vecino Vicente Llorca manifiesta en esta fecha continua trabajando en mina San Rafael”.

Al día siguiente se le envía otro oficio "Manifestando que en la mina San Francisco de este término se está secando el ocre extraído en dicha mina habiendo dado orden de suspender inmediatamente estos trabajos.” Y ese mismo día se escribe a Vicente Llorca "Manifestándole haber denunciado que hoy está acarreando el material ocre extraído de la mina San Francisco en cumplimiento a lo ordenado por el Excmo Gobernador Civil […] en oficio de fecha 3 de los corrientes suspenda inmediatamente estos trabajos". [12]. Por tanto parece que la extracción se clausuró y no he encontrado ninguna referencia sobre la continuación de extracción de ocre durante la Guerra Civil.


19 Escombrera en las proximidades de la entrada a la mina. El color amarillo intenso del ocre destaca claramente del de la piedra.  


Desde principios de la década de 1940 la Sociedad “Asensi, Pérez y Lillo S.L”. explotó la “mina San Francisco” de Serra Gelada y el mineral, según se indicaba en esos años, era con diferencia el mejor ocre de la provincia. Se manufacturaba por una empresa  de Muchamel en las fábricas de colores minerales que poseía en San Vicent del Raspeig, la “Ocrera Alicantina”, y también en Villafranqueza. En 1955 era la única explotación de ocre de la provincia y producía 207 toneladas [13].

En el año 1947 encontramos una referencia a la mina en el Boletín Oficial del Estado que publicaba una Orden indicando: 

se habilita el punto de costa denominado Cala del Barranco de Chimo, del término municipal de Benidorm (Alicante) para el embarque en régimen de cabotaje del mineral de ocre procedente de la mina «San Francisco», procedente de la razón social «Asensi, Pérez y Lillo, Sociedad Limitada», enclavada en el expresado término municipal”. Era la respuesta a la instancia tramitada por el gerente de dicha Sociedad Francisco Pérez Soler, conocido en Benidorm como “el Carburero”. Indicaba que “la entidad que representa es propietaria de una mina de mineral de ocre, titulada «San Francisco», enclavada en el término municipal antes citado; que el mineral que de la citada mina se extrae es actualmente transportado por medio de caballerías hasta el lugar que permite su carga en los carros que la llevan a la estación de ferrocarril más próxima para su transporte a Alicante; que este transporte, que supone un recorrido de seis kilómetros, encarece el precio del mineral y dificulta el desarrollo de su industria por la escasez de caballerías y material ferroviario que se precisa para efectuarlo, y que situada la citada mina a unos 130 metros de la Cala del Barranco de Chimo se obtendría con la habilitación que solicita una notable reducción en los gastos de transporte y una facilidad extraordinaria para la explotación de la referida mina”.

Las autoridades provinciales habían emitido informes favorables, se cumplían las ordenanzas de aduanas y se beneficiaba la industria minera de la región sin perjuicio ni gasto para los intereses del Tesoro.  Por eso se decidía:

1. Habilitar el punto de costa denominado Cala del Barranco de Chimo, del término de Benidorm (Alicante), para el embarque, en régimen de cabotaje, del mineral de ocre procedente de la Mina San Francisco […].

2. Los mencionados embarques se realizarán con la intervención y documentos de la Aduana de Altea y la vigilancia del puesto del Resguardo de Caletas [Guardia Civil del Racó de l’Oix]; y

3. La entidad solicitante queda obligada al abono de las dietas y gastos de locomoción que reglamentariamente corresponda al funcionario de la Aduana de Altea que intervenga los despachos de que se trata, y a facilitar los útiles que sean necesarios para realizarlos” [14].


20 Imagen de una mina alicantina de la primera mitad del siglo XX


En el balance presentado por la empresa “Asensi, Pérez y Lillo S.L” el 31 de Diciembre de 1948 se mostraba un resultado superior al previsto, debido a mejoras en la maquinaria y sobre todo a la gran calidad del producto de la mina San Francisco que ese año aportó 619 toneladas:

"Desde luego, el resultado de este ejercicio, no es debido exclusivamente a esta renovación en nuestros elementos de fabricación, pues ello aunque ha contribuido en parte, no era lo suficiente si no hubiéramos tenido la suerte de que la "mina San Francisco", nos hubiera dado en este ejercicio, un mineral de tan alta calidad como jamás tuvimos, hasta el extremo de que al someterlo a nuestro sistema de lavado, ha perdido menos de un 10% , acostumbrados a como estábamos a que este tratamiento de levigación, perdían nuestros minerales mas de un 60%  de impurezas, fácilmente se os alcanzará la gran ventaja que este rendimiento a reportado a lograr el resultado tan favorable en este balance." [15].


Como en el resto de las minas alicantinas de la época el trabajo no estaba mecanizado: “todo se hacía a mano incluso la extracción hasta el exterior mediante sacos que rezumaban la humedad. Posteriormente se instaló una vía por las que circulaban unas vagonetas, con lo que se hizo más fácil la tarea y se incrementó la producción hasta alcanzar las trescientas toneladas diarias [lo correcto es “anuales”].

A pie de mina se ponía el ocre a secar, pues era muy elevado el grado de humedad, para más tarde ser transportado, a lomos de caballerías y por estrechos senderos, hasta el Rincón de l'Oix, desde donde se acarreaba hasta su destino, en San Vicente del Raspeig” [16].


Sobre el final de esta mina he encontrado informaciones contradictorias: mientras un autor dice que su explotación duró poco tiempo otro afirma que la mina San Francisco fue la última mina de ocre que se cerró en la provincia. Es un tema pendiente de averiguar.

La mina quedó como un atractivo de la zona y fuimos muchos los que nos adentramos por alguna de sus galerías. Vimos en el suelo los raíles metálicos, un capazo de cáñamo y restos de utensilios metálicos utilizados para la extracción del mineral. En aquellos momentos la entrada de la mina estaba abierta pero posteriormente se tapió con ladrillo. Actualmente la entrada está protegida sólo por una valla metálica pero la protección es inútil porque han derribado un trozo y se puede entrar con facilidad.

21 En la valla metálica que protege la entrada falta el trozo a la derecha de la puerta por lo que es sumamente sencillo acceder a su interior.


22 Entrada a la mina. 


En el año 2008 investigadores del Museo Valenciano de Historia Natural cartografiaron más de 2.000 metros de galerías de esta mina y los sorprendentes resultados obtenidos les impulsaron a pedir que fuera incluida en el catálogo de cavidades de especial interés de la Comunidad Valenciana junto con la Cova del Far del Albir.

Esta mina de la cala del Ti Ximo es la cavidad artificial de mayor desarrollo de la provincia de Alicante [17]. Para Benidorm es otro de los muchos elementos de interés que se deben preservar dentro del Parc Natural. También es un patrimonio que se debe difundir y espero que este artículo contribuya a ello.


NOTAS

Agradezco a Francisco Bou, descendiente de Joaquín Orquín, los testimonios escritos y orales transmitidos por su familia que me han permitido corregir algunas imprecisiones de las fuentes de información disponibles.

[1] https://pacobou.wordpress.com/2017/04/01/el-barranquet-del-ti-chimo/.

[2] http://elpais.com/diario/2001/08/09/cvalenciana/997384699_850215.html

[3] http://maesbatercerapagina.blogspot.com.es/2013/07/cala-del-tio-chimo-quien-y-como-era-el.html)

[4] ALMIÑANA OROZCO, P: “Els topònims de Benidorm (1321-1955)”. Ajuntament de Benidorm, 2001, pag. 288.

[5] BOE 12-7-1947. 

[6] “El alicantino: diario católico”,  9/3/1894

[7] http://rutasyvericuetos.blogspot.com.es.

[8] AMB, 4813/20: "Libro-Registro Salida de Documentos"

[9] Juan Miguel Casanova Honrubia, José Manuel Sanchis Calvete, Manuel Canseco Caballé: “Minerales de la Comunidad Valenciana”, Caja de Ahorros del Mediterráneo, 2002, pág 98.

[10]  http://rutasyvericuetos.blogspot.com.es).

[11] José Bayona Vives: “Serra Gelada”, Revista Oficial Festes Majors Patronals de Benidorm año 2000 pag. 127.

[12] AMB, 4813/20: "Libro-Registro Salida de Documentos".

[13] https://rutasyvericuetos.blogspot.com/2015/03/las-minas-de-ocre-de-muchamiel-y-san.html.

[14] BOE 12-7-1947.

[15] (https://rutasyvericuetos.blogspot.com/2013/03/.

[16] José Bayona Vives: “Serra Gelada”, ROFMPB año 2000 pag 127.

[17] http://www.laverdad.es/alicante/20081227/cultura/benidorm-finaliza-cartografia-minas-20081227.html


 

3 comentarios: